Los hay dulces y salados. En tarrina, cucurucho y servidos en copa. Con y sin azúcar. Grandes y pequeños. Sencillos y de diseño. Hasta los hay merecedores de alguna que otra estrella Michelin. Sean como sean, nos gustaría que nos acompañaras por esta genial, refrescante y divertida degustación por los mejores helados de Mallorca.
Gelateria Rosario
Si quieres probar el mejor helado de Palma, Gelateria Rosario es el lugar al que tienes que ir. Esta tienda tiene los helados y sorbetes artesanales más singulares que encontrarás en la isla. Los creadores de esta maravilla se remontan a 1979, ubicados en un pequeño pueblo llamado Andratx, que también es una parada obligada durante tu estancia en Mallorca, y llevan años proporcionando pura felicidad a quienes prueban sus productos.
El local, muy bien situado, a tan sólo 5 cinco minutos de la Catedral de Palma y del Paseo del Borne, te permitirá disfrutar de la ciudad mientras refrescas tu paladar con alguna de las numerosas opciones que el establecimiento pone a tu disposición. La decisión más difícil será qué sabor elegir ese día. Entre las deliciosas opciones, encontrarás sabores como Pistacho (D.O. Sicilia), Almendra (D.O. Mallorca), Avellana (D.O. Piamonte), Fresa, Stracciatella (D.O. Madagascar), Brownie y muchos más. En Gelateria Rosario no sólo encontrarás los mejores helados y sorbetes, sino que también podrás probar unas impresionantes galletas caseras y refrescarte con alguna bebida de tu preferencia (agua, zumos, café, etc.). Si visitas Palma, no puedes perderte esta heladería.
(Plaça del Rosario, 4 - Palma)
Iceberg
Comenzamos la ruta en la capital de la isla. Esta cadena de heladerías (con varias sucursales en las zonas más céntricas de Palma) logró la cuarta posición en la final del Gelato World Tour celebrada en Rimini en el año 2014 como ‘Mejor Helado del Mundo’. Fue el ‘Sorbete de naranjas de Sóller, hierbabuena y cardamomo’ el que deslumbró al jurado por su sabor y originalidad. La clave del éxito de Iceberg es el mimo que ponen al escoger las materias primas de todos helados, con las que elaboran referencias tan apetecibles como el café crunch, el banutella, el de té japonés o el sorbete de mojito.
(Palau Reial, 3. Palma)
Rivareno
La tradición italiana se saborea en cada una de las referencias de esta heladería. Se hacen llamar el ‘laboratorio del gelato italiano’, ya que lo que pretenden es ofrecer a sus clientes una auténtica experiencia sensorial. Helados que contienen más del 55% de fruta -cremosos, frescos e intensos-, son más de 100 sabores los que ofrecen para satisfacer cualquier deseo. ¿Y es que no se te hace la boca agua al pensar en un helado de marrón glacé, uno de azafrán con sésamo o uno con crujiente de caramelo? Todos ellos son imprescindibles en una lista con los mejores helados de Mallorca.
(Plaça de la Llotja, 1. Palma)
Gelats Paco
1.950 vio nacer esta mítica heladería. Sus cucuruchos han hecho las delicias de muchas generaciones de mallorquines (en otros tiempos era parada obligatoria antes de ir a ver una película en los Multicines Metropolitan), y sus bolas pueden ser de sabores tan originales como el de natillas con ensaimada, tarta sacher o el de queso fresco con naranja.
(Benet Pons i Fàbregues, 1 y Blanquerna, 10. Palma)
Can’n Joan de s’Aigo
El centro de Mallorca es un paraíso para los amantes de los helados. Este templo de la restauración mallorquina abrió sus puertas en el siglo XVII (para incrédulos hay unos azulejos en sus paredes que así lo confirman). Y como referencia clásica que es, una variedad de las de toda la vida para pedir en el mostrador: el riquísimo helado de avellana. Pero ojo, no se te ocurra pedirlo sólo, combínalo con un quarto (un brioche de almendra suave y esponjoso) para redondear tu visita y morir del gusto.
(Can Sanç, 10. Palma)
Gelatería Ca’n Miquel
La familia Solivellas está a punto de cumplir 40 años ofreciendo algunos de los mejores helados de Mallorca. Aunque las distintas variedades de chocolate (como el de chocolate jamaicano) hacen las delicias de locales y turistas, los paladares más intrépidos también podrán saborear otras fórmulas más arriesgadas como el helado de trampó, el de queso de Mahón, el de hierbabuena y romero, o el de rosas de Alejandría. ¡En total tienen más de 90 sabores, así que estamos seguros que encontrarás a tu ‘media naranja’ aquí.
(Montcades, 9. Palma)
Salimos de la capital para seguir saboreando algunos de los mejores helados de Mallorca. El paseo continúa por algunos de los pueblos más bonitos de la isla. Continuaimos con la degustación, ¿no?
Garrido
Estos dos locales míticos de Alcúdia beben de la tradición de los helados alicantinos. Con más de 40 años de sabiduría heladera, destacan por su amplia carta de copas de helado de sofisticada nomenclatura. ¿O es que un plato de espaguetis de helado con vainilla y nata no te lo parece? Estamos seguros de que también te sorprenderán la ‘Copa Caribe’ o la ‘Copa Puesta de Sol’ ¿Apostamos?
(Paseo Marítimo, 20 y Carrer del Moll, 27. Alcúdia)
Gelats Valls
Sus productos son de temporada y 90 años de experiencia avalan a esta clásica referencia de Pollença. Esta heladería centenaria destaca por las materias primas empleadas, -fresca y autóctonas-, por eso sus producciones son limitadas y están lideradas por los helados de naranja (de su propia finca), albaricoque, higo o limón. El paseo del puerto es su ubicación, lugar inmejorable para disfrutar de estos manjares.
(Passeig Anglada Camarassa, 11. Pollença)
Heladería San Remo
Una pregunta para los paladares más inquietos y vanguardistas: ¿te atreverías con un helado con sabor a ensaimada o pomelo rosado?. Pues si la respuesta es afirmativa podrás elegir una de estas referencias disfrutando de unas maravillosas vistas al Mediterráneo. Tranquil@, que también tienen en su carta sabores más convencionales como el de chocolate con menta o el de tiramisú. Eso sí, todos ellos son artesanos.
(Ingeniero Antonio Garau, 32. Ca’n Picafort)
Sa Fábrica de Gelats
En el norte de la isla también se pueden degustar helados deliciosos. En Sa Fàbrica llevan desde 1.994 siendo especialistas en transformar las mejores materias primas en las más apetecibles tarrinas, y afirman que los elaboran ‘como los de antes’. Un
imprescindible en su carta es el de naranja, pero el de avellanas, el de higos o el de mandarina también te harán salivar del gusto.
(Plaça des Mercats, s/n. Sóller)
Y si al final del día prefieres no salir de casa y te seduce más un plan de sofá, peli y helado, los Gelats Jop no podrán faltar en tu nevera. Este nombre está vinculado al pueblo de Campos y a la familia Pomar. Y es que esta fábrica no tiene local comercial, sino que ofrecen sus productos en los comercios de la zona, con especial arraigo en el sur de la isla. Una manera genial de poder degustar los mejores helados de Mallorca: en el salón de casa (o de tu hotel) con la mejor de las compañías. ¡Insuperable!