Volver al pasado, conocer la historia de la isla, saber un poco más sobre la Fortaleza de la Mola y descubrir los rincones más alucinantes que se esconden tras esos muros.

Quédate si quieres volver al siglo XIX y conocer cada secreto de una de las mayores fortalezas europeas situada en la isla de Menorca.

La historia de la Mola

La fortaleza de la Mola o también conocida como la Fortaleza de Isabel II se construyó entre los años 1848 y 1875 con el objetivo de defender la isla de los británicos. Esta fortaleza tenía un lugar privilegiado para los ingleses, ya que desde allí podían dominar las rutas marítimas.

Fortaleza de la Mola

La construcción de La Mola duró más de lo esperado y en el momento en el que se inauguró su artillería ya estaba obsoleta pero gracias a la revolución tecnológica se pudo poner a punto.

La fortaleza se conserva en perfectas condiciones gracias a que nunca ha sido atacada, por eso podemos contemplar todos sus rincones sin tener que dejar nada a la imaginación.

Vive la fortaleza

Visitar la fortaleza es una parada obligatoria, un reclamo turístico que no puede faltar en tu planning de viaje.

Una de las razones por las que tenéis que ir a la Mola es por las vistas, los miradores que podréis encontrar dentro de la fortaleza os dejarán perplejos. Algunos de los miradores más bonitos son:

– El mirador de Puerta de la Reina, donde podréis contemplar el Castillo de San Felipe.

– El mirador de la torre de la princesa, desde aquí se puede ver toda la costa de Mahón.

– El cañón vickers, es el punto más alto y además de los acantilados que se ven desde ahí, también veréis desde la isla del aire hasta el Faro de Favàritx.

Fortaleza de la Mola

Acantilados, vistas panorámicas… no podréis dejar de hacer fotos.

Puedes vivir la fortaleza de varias formas, pero tenéis que tener en cuenta que si queréis ver al completo la Mola el tiempo que haga es muy importante. Las altas temperaturas van a dificultar un poco la visita, por eso os recomendamos ir cuando las temperaturas no seas muy altas.

¡Quiero visitar la fortaleza de la Mola!

Encontrar la Mola no es difícil, está situada al norte de la isla, muy cerca de Mahón. Podréis encontrarla fácilmente siguiendo los carteles.

Hay que tener en cuenta antes de ir que esta visita te llevará unas dos horas aproximadamente y como hemos dicho antes recomendamos hacer la visita en un día no muy caluroso.

Fortaleza de la Mola

El precio de la visita en entrada general es de 8 € y si preferís que os vayan contando la historia y los secretos que esconden los muros de la fortaleza mejor comprar la visita guiada por 3 € más.

Si no podéis ver la Mola entera podéis dividirla en dos zonas:

– La zona fortificada donde veréis los frentes defensivos, las galerías subterráneas y los miradores.

– La zona vickers donde veréis las cámaras de tiro, el almacén de munición o la carga de proyectiles.

También hay una visita nocturna que será una experiencia única por los colores del atardecer, si queréis vivir una visita diferente, esta puede ser la tuya.

¿Qué ver cerca de la Fortaleza de la Mola?

Después de desplazarnos para visitar la Fortaleza de la Mola podéis quedaros por los alrededores y disfrutar de los muchos rincones que hay cerca. Algunos de estos rincones que os recomendamos son:

Podéis perderos por las calles de Mahón, la capital de Menorca, conocer el patrimonio y visitar su puerto, el puerto natural más grande del mundo.

poblados talayóticos_Talatí de Dalt

Situado a pocos kilómetros podréis encontrar el Talatí de Dalta, un monumento del año 1300 a.C, las ruinas de un poblado talayótico. Si queréis visitarlo la entrada para los adultos es de 4 € y para los menores de 8 años tienen la entrada gratuita.

También podéis daros un baño en una de las calas que hay muy cerca de la Mola, la Cala Sa Mesquida. Esta cala tiene la arena blanca y fina, perfecta para descansar después de visitar la fortaleza.

Y para coger fuerzas, os recomendamos el restaurante Cap Roig, muy cerca también de Sa Mesquida.

Te sorprenderán todos los secretos que la Fortaleza de la Mola esconde en sus muros y las espectaculares vistas que encontraremos desde allí, no te olvides la cámara para inmortalizar cada rincón.

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